El Ayuntamiento de Logroño afronta la crisis con 15 medidas de austeridad para ahorrar 5 millones de euros

El alcalde anuncia también la inmediata puesta en marcha de un plan social con actuaciones de apoyo a los parados

Vivimos momentos de crisis y, por tanto, de apretarse el cinturón. El Ayuntamiento logroñés quiere dar ejemplo, y para ello asumirá una serie de medidas de austeridad que se traducirán este año en el ahorro de unos cinco millones de euros. Además de esta actuación, que afectará directamente al millar de funcionarios municipales, el alcalde, Tomás Santos, anunció la inmediata puesta en marcha de un plan social de medidas de apoyo a los parados.
¿De dónde se recortarán gastos? Las claves se hallan en las quince medidas que tejen el plan de austeridad, algunas de ellas ya en marcha, como la congelación de sueldos a concejales y grupos políticos, del gasto corriente y del presupuesto de protocolo y comunicación, así como el de Festejos.
A partir de ahora, además, habrá un reajuste en los capítulos de subvenciones, horas extras, gastos en telefonía y correos, ahorros energéticos e incluso en los coches oficiales.

El ahorro más sustancioso -de 2,2 millones de euros- se logrará con el recorte del gasto corriente en todas las concejalías. Otro buen pellizco, de 1,1 millones de euros, se obtendrá con la reducción de las subvenciones a las asociaciones que no tengan carácter social. En este punto, el alcalde garantizó que, para aquellas que tengan un componente social, «se va a respetar la asignación y en algún caso tendrán un ligero incremento».
Los gastos de protocolo y comunicación se reducirán en 295.000 euros y los ligados a actos festivos (comida del día de la Patrona, vino de Navidad o entradas para los toros en San Mateo), en 26.400 euros.

También habrá un mayor miramiento con las horas extras, lo que se traducirá en un ahorro de 300.000 euros, y se reducirán en lo posible las contrataciones externas y las salidas profesionales.

El ahorro energético estará relacionado con el uso del aire acondicionado, de la calefacción y el consumo de los ordenadores y, fuera del Consistorio, con sistemas de bajo consumo para el alumbrado.

Tomás Santos también anunció la sustitución de los dos coches oficiales, «los famosos Mercedes», por otros de menor coste, así como topes al gasto telefónico y en correos. Por último, la administración electrónica permitirá recortar el gasto de papel. Estas quince medidas son extensibles a Logroño Turismo y Logroño Deporte.

«No hacemos otra cosa que aplicar manuales de buenas prácticas», comentó la concejala de Organización, Sara Alba, refiriéndose al plan de austeridad del Ayuntamiento. «La singularidad es que aprovechamos una situación de coyuntura económica para ponerlas en marcha», si bien tendrán continuidad tras la crisis, aseguró.

¿Cómo asumen los funcionarios municipales este plan? El alcalde lo tiene claro. «Tenemos -afirmó- el mejor cuerpo de funcionarios que pueden tener las administraciones locales, y nos consta que van a asumir estas medidas sin ningún problema, porque son lógicas, razonadas y, en muchos casos, con un soporte técnico». El edil Vicente Urquía apuntó que este ajuste se plantea sobre gastos heredados, y «en ningún caso generados por este equipo de Gobierno».

El Grupo del PP apuntó ayer que cree un ejemplo «de doble moral» el plan de austeridad, ya que se ha dado a conocer un día después de que en el Pleno aprobaran la adhesión de Logroño a tres redes de ciudades «que lo único que implican es más gasto» y, en cambio, «se negarán a aprobar acciones frente a la crisis, como el incremento de las ayudas al alquiler».

Fuente: Larioja.com http://www.larioja.com/20090307/rioja-logrono/ayuntamiento-afronta-crisis-medidas-20090307.html